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Clase abierta sobre la violencia estatal contra personas trans

El recorte histórico es entre el retorno a la democracia y la derogación de los códigos contravencionales, vigentes en la provincia hasta 2010. Participarán sobrevivientes que impulsan un proyecto de reparación para las víctimas de la persecución estatal. El conversatorio es organizado por la Mesa de Reparación para sobrevivientes travesti-trans post dictadura y la cátedra de Derechos Humanos de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales (UNL).
Victoria Stéfano
Autora: Gise Curioni

Este miércoles 26, desde las 16, en el aula 25 de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional del Litoral (Candido Pujato 2751), se desarrollará una clase abierta sobre la violencia del Estado hacia las personas trans y travestis entre 1983 y 2010.

El recorte temporal no es arbitrario. La jornada, de participación libre y gratuita, y abierta al público general, se enfocará en visibilizar la persecución hacia las identidades trans bajo la vigencia de los códigos contravencionales que penalizaban la prostitución y el travestismo en la provincia de Santa Fe.

Fabiana González es una de las impulsoras del proyecto que busca que el gobierno provincial reconozca la violencia institucional y la repare de la misma manera que se hizo con las sobrevivientes a la última dictadura cívico, eclesiástica y militar.

En ese marco es que, como explica Fabiana, "estamos intentando entrar a la Universidad para visibilizar todo este tema que tiene que ver con la la historicidad trans de los años 90", que las mismas supervivientes perciben como un relato aún muy oculto dentro de la memoria en construcción de esa población.

Poner sobre la mesa estas violencias en un espacio institucional como la casa de estudios es "una de las maneras de poder hacerle entender a la sociedad, a las personas y a los legisladores todo lo que vivió la comunidad", sostiene González.

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La activista trans santafesina fue una de las principales impulsoras del Cupo Laboral Trans de la UNL, y los lazos tendidos con la Universidad en ese trayecto permitió que hoy sea el espacio elegido para llevar adelante esta clase.

"Estamos buscando espacios, lugares, principalmente de la Universidad, donde se forman los profesionales, donde nos interesa que la mayoría de los abogados, los trabajadores sociales, sepan lo que tuvo que vivir la comunidad trans, más que nada para que esto no se vuelva a repetir y para que también se repare", indica la mujer.

"La democracia para nosotras empezó en 2012"

Fabiana insiste en que "principalmente lo que buscamos con las cátedras en las universidades es eso: poder visibilizar todas las violaciones a los derechos humanos que se cometieron con la comunidad", en un momento histórico donde se visibilizan y problematizan toda una serie de violencias que en otro momento no se cuestionaban, entre ellas, las violencias sexuales.

"Nosotras sufrimos violaciones por presos y policías, porque los mismos policías nos metían dentro de los calabozos para ser violadas por los presos, después de que éramos abusadas sexualmente por ellos, y éramos menores", relata la militante y añade que estas violencias son las que buscan visibilizar.

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Fabiana habla sobre su propia supervivencia como disociándose de ese pasado. "Es extraño de explicar haber vivido esa época. Yo misma muchas veces me pregunto cómo pude haber pasado tanto. Tiene que ver con esto de haber nacido y haberme criado en ese contexto de violencia permanente. Ya lo había adoptado, es como aprendí a vivir, y por eso no lo sentía como violencia. Una aprendió en ese contexto de persecuciones, de violencias, de maltrato a sobrevivir, así que era lo que había y uno creía que era así", rememora la sobreviviente y apunta que hoy, bajo el paradigma de los Derechos Humanos, es posible volver a mirar hacia atrás y poner la violencia donde estaba: en manos del Estado.

La militante refiere a los dichos de Marcela Viegas durante su declaración como mujer trans sobreviviente a la dictadura en el juicio por la causa del Pozo de Banfield para remarcar un hito en la historicidad travesti y trans: "Para nosotras la democracia empezó en 2012".

Autora: Gise Curioni

En ese corto lapso de tiempo es que comenzó la búsqueda que permitió a Viegas, y a un poco más de una decena de mujeres trans, acceder a la pensión para ex-presos políticos, sentando un precedente en el reconocimiento de las estrategias de exterminio contra la población trans y travesti sostenidas durante la dictadura militar.

Ahora González, junto a otras sobrevivientes de toda la provincia, impulsan un proyecto de ley de Reparación Histórica post dictadura que se encuentra en discusión en las comisiones de la cámara baja de la Legislatura provincial.

La iniciativa busca que el Estado se haga cargo de la persecución contra la población trans-travesti, sostenida hasta la derogación de los artículos que penalizaban la prostitución, el travestismo y el escándalo público y que se utilizaban para violar sistemáticamente los derechos humanos de esta comunidad hasta el 2010.

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"El Estado tiene que hacerse responsable de todo el mal que hizo en determinado momento. Ni siquiera podíamos caminar con nuestras propias madres por la calle en esa época, nos prohibieron salir a pasear con nuestros propios padres a la calle cuando éramos jóvenes. Eso lo tienen que reparar. Tienen que reparar la cantidad de personas que murieron", asevera la entrevistada.

Para Fabiana es un milagro estar viva después de todo aquello y, en su visión, "las que ahora podemos hablar somos como un pedazo de historia viviente". "Yo pude haber muerto en la calle, pero estoy haciendo", finaliza.

La jornada

El conversatorio, organizado entre la Mesa de Reparación para sobrevivientes travesti-trans post dictadura y la Cátedra de Derechos Humanos de la casa de estudios, está previsto para este miércoles a las 16 en el aula 25 de la FCJS-UNL. La entrada es abierta, libre y gratuita.