A 46 años del golpe militar en Argentina, la militante Noelia Trujillo cuenta cómo fue sobrevivir a la dictadura y al después; qué ocurrió con la comunidad LGTBIQ+ y por qué es importante que la sociedad lo sepa.
Noelia “Noly” Trujillo es una de las pocas mujeres trans que sobrevivió al atropello militar y policial durante los años de terror de la dictadura militar en el territorio santafesino. La militante sostiene que el haber sobrevivido le permite tener un papel de educadora para que, más allá de haber superado ese dolor, la sociedad pueda saber qué es lo que atravesaron ella y sus compañeras.
Reconoce que, a diferencia de muchas de ellas que fueron expulsadas de sus hogares, en el suyo nunca le faltó nada. Su renacer como mujer trans fue en pleno inicio de la dictadura. Fue presa por primera vez a los 16 años y su madre logró sacarla de la cárcel con la promesa a un juez de que terminaría la secundaria. Se fue a Buenos Aires pero, pese a ser una ciudad más grande, la realidad era la misma. “Hubo una política de persecución sistemática hacia nosotras”, sostiene. Noelia reivindica la semilla de la memoria, la cuida y la alimenta junto a les jóvenes a quienes su generación les fue abriendo camino para que puedan transitarlo en libertad.
En Argentina 400 personas travesti-trans desaparecieron durante la dictadura. Noly es una de las pocas sobrevivientes y una de las primeras 19 mujeres trans que en 2018 fue reconocida por el Estado santafesino como víctima de la última dictadura militar a través de una reparación histórica que consiste en una pensión. Fue lograda gracias a un recurso de amparo en la Justicia y a la lucha de las organizaciones sociales por mantener viva la memoria, la verdad y la justicia.
Autoras: Realización de Gabriela Filereto y Priscila Pereyra, edición de Carolina Robaina y Victoria Carballo
