En entrevista con Periódicas, la precandidata a gobernadora por la lista Adelante, en el frente Unidos para Cambiar Santa Fe, hizo un análisis de cuáles son, a su criterio, los principales factores que incrementan la desigualdad de género en la provincia y explicó cuáles son las principales propuestas de su plataforma en esta materia.
Mónica Fein tiene una extensa carrera en la política santafesina, de la que forma parte desde el año 1997. Nacida y criada en Rosario, fue secretaria de Salud Pública, concejala e intendenta de la Cuna de la Bandera durante dos gestiones, de 2011 a 2019. Actualmente es diputada nacional por Santa Fe y presidenta del Partido Socialista de Argentina. Este año se postula como precandidata a gobernadora de la provincia por la lista Adelante, que disputa la interna del frente Unidos para Cambiar Santa Fe. Lleva como compañero de fórmula al periodista y docente santafesino Eugenio Fernández.
En entrevista con Periódicas, la precandidata se refirió al aumento de los asesinatos de mujeres en contextos vinculados a la narcocriminalidad, hizo un análisis de cuáles son los principales factores que incrementan la desigualdad de género en la provincia y presentó las principales propuestas de su plataforma para abordar estas problemáticas .
—¿Cómo se llegó dentro del Partido a la decisión de que haya dos mujeres encabezando las principales precandidaturas, teniendo en cuenta que vos te postula en la carrera para la Gobernación y Clara (García) para la Legislatura?
—Con Clara García, después del fallecimiento de Miguel Lifschitz, las dos como dirigentes políticas entendimos que debíamos preservar el legado de un compañero tan referente y asumimos el compromiso de seguir construyendo. En 2021 ella fue candidata a senadora y yo a diputada, y así recorrimos la provincia. Configuramos junto a compañeras y compañeros del Partido un equipo de trabajo permanente que analiza la realidad y piensa qué es lo mejor para cada momento: y ahora sentimos -entendiendo que Perotti se iba a presentar como primer precandidato a legislador y que iba a llevar a todo su gabinete en la lista- que lo mejor es que lo enfrente Clara, que tiene tanta experiencia legislativa y mucho recorrido en toda la provincia, y que mi experiencia ejecutiva después de haber sido intendenta ocho años en Rosario, después haber estado en los equipos de Hermes (Binner) y Miguel, aportara a una tarea ejecutiva.
"Nos sentimos parte de un proyecto, y la verdad es que el hecho de que seamos dos mujeres no es algo que pusimos sobre la mesa porque es algo que lo vemos como natural, si bien es verdad que no es tan común y que no nos ha sido fácil a ninguna de las mujeres protagonizar procesos políticos", agregó la entrevistada.
Tareas de cuidado, violencia de género y cáncer de mama: los desafíos
—¿Qué políticas de género que se hayan implementado bajo tu gestión al frente del municipio de Rosario te gustaría recuperar o traer a la Provincia?
—Creo que hay nuevos desafíos que nos ha dejado la pandemia, y sobre los que ya estamos trabajando en la ciudad. En primer lugar, es claro que las mujeres hemos quedado, mucho más que antes, a cargo de las tareas de cuidado, por muchas razones, y esa realidad no está siendo acompañada por el Estado. Y los derechos de las mujeres que cuidan muchas veces no están garantizados. Por eso, lo primero que quiero hacer es un relevamiento de todas las áreas de cuidado que tiene la provincia de Santa Fe, para poder fortalecer las áreas públicas, articular con las que tienen las organizaciones sociales y también poder trabajar con las del sector privado. No sólo las instancias de cuidado de niños y niñas, sino también las de personas con discapacidad y las de adultos y adultas mayores. Es clave implementar claramente una política que fortalezca los procesos de cuidado.
Siguiendo con su respuesta, Fein indicó que "el otro tema que trabajamos muy fuerte en Rosario y que hay que tomar como prioridad a nivel provincial es la atención y la prevención de la violencia de género. Frente a esto hay mucho para hacer y a mí me gustaría que el Estado provincial jerarquizara los lugares de acogida y las políticas de acompañamiento, que las instituciones como los centros de salud que por su tarea están en condiciones de detectar casos de violencia de género, tengan adonde referir o recurrir para que las mujeres que están en esta situación no queden sin asistencia".
"En Rosario, por ejemplo, la ciudad tiene dos lugares propios de acogida de mujeres en situación de violencia de género, y cuenta con un montón de programas; entre ellos uno muy interesante que acompaña a mujeres embarazadas que están finalizando su secundaria, a las que apoya con un subsidio para que terminen la escuela y que además trabaja sobre la prevención de noviazgos violentos", ejemplificó.
También advirtió que "el tercer tema urgente que, a mi criterio, hay que abordar, y que tiene indicadores muy alarmantes hoy en Argentina, es que hay una buena parte de las mujeres que padecen cáncer de mama, y especialmente las que se atienden en el sector público, llegan tarde a la detección de la enfermedad, que es la más común y la principal causa de muerte entre las mujeres. Y un estudio que se hizo a nivel nacional demostró que esto sucede principalmente porque no tienen con quién dejar a los hijos e hijas a la hora de hacerse una ecografía o una mamografía, o bien en su trabajo no le dan el permiso necesario para asistir cuando tienen el turno para hacérselas".
"Claramente, es necesario tratar en tiempo y forma todas las patologías, pero respecto al cáncer de mama está demostrado que se llega tarde y que eso determina la diferencia entre la vida y la muerte de una mujer en una enfermedad en la que la detección temprana está relacionada a una alta tasa de buena evolución. Hay un factor de género por el cual muchas mujeres tienen inconvenientes para acceder a ese diagnóstico a tiempo, y esto como Estado nos obliga a repensar las políticas de salud desde lo más básico, como los horarios y los lugares de atención, para que todas las mujeres puedan acceder temprana y adecuadamente a la mamografía", sentenció.
—Desde tu análisis político, ¿por qué considerás que en Santa Fe nunca hubo consenso legislativo para declarar la Emergencia en Violencia de Género, algo que las organizaciones feministas y de territorio vienen reclamando hace años?
—Muchas veces desde la política se entiende que declarar la emergencia en un lugar quiere decir que en ese territorio hay un problema y en el resto no, y creo que esa es una lectura equivocada. Yo presenté un proyecto para declarar la Emergencia en Violencia de Género a nivel nacional y si eso se logra, luego cada provincia deberá adherir. Hay que declarar esta emergencia en cada lugar donde se pueda, porque la violencia de género se expresa con distintas particularidades en cada localidad, en cada provincia y en cada territorio, pero no hay ninguno que esté exento
"Más temprano me preguntaron desde un medio nacional si estoy de acuerdo con la existencia o no de las áreas o ministerios de la Mujer, para lo cual claramente estoy a favor, pero creo que lo más importante es tener políticas de género. Muchas veces resulta que se crea un Área de la Mujer para decir 'bueno, con esto ya cumplí' y adentro no hay nada, no hay recursos, no hay herramientas, no hay equipo. Y frente a esto, yo sí soy crítica y cuestionadora. Crear un Área de la Mujer o de la Diversidad para que simplemente figuren organigramas sin políticas a desplegar es absolutamente negativo. Lo más importante es que tengan políticas diseñadas, recursos y que articulen transversalmente con las otras áreas como Educación, Desarrollo humano o Transporte público, por ejemplo. Desde mi lugar no defiendo ministerios vacíos, defiendo políticas públicas concretas", opinó la precandidata.
—Como rosarina y desde tu experiencia política en esa ciudad, ¿qué análisis o reflexión hacés respecto del incremento de los asesinatos de mujeres en contextos vinculados a la narcocriminalidad?
—En el primer observatorio que hicimos con datos ciertos de heridos y muertos por armas de fuego, el 97% eran varones entre 15 y 30 años. Pero en los últimos años los datos muestran que más mujeres han sido víctimas de esta violencia, y más mujeres son parte de los procesos de la narcocriminalidad, sobre todo en el narcomenudeo. No son las que lideran los clanes, pero sí están presentes en lo más bajo de la cadena que es el narcomenudeo. Yo creo que tiene que ver con que también la exclusión y la pobreza en la que se ha sumido la sociedad impacta fundamentalmente a mujeres, niños y niñas. En ese proceso, más personas están vulnerables a los actores delictivos para sobrevivir para buscar una alternativa porque están las incluyen porque las condicionan, porque las ponen en un lugar también de presión y terminan siendo rehenes de procesos de narcocriminalidad.
"Para abordar esto, desde el Estado hay que atacar las situaciones de vulnerabilidad, de pobreza y de exclusión que está teniendo gran parte de la sociedad, porque todas las mujeres que han muerto víctimas de este tipo de violencia son pobres, es decir que hay un componente de exclusión que es clave a la hora de analizar este fenómeno y que no se puede ignorar a la hora de diseñar políticas para la prevención", concluyó Fein.
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