¿Ruta o laberinto? A partir de propuesta realizada por Generar y el Movimiento Evita, se realizó este jueves en Festram una jornada de análisis para establecer cuáles son las trabas que enfrentan quienes atraviesan esta problemática y quieren denunciar.
No para -nunca para- y los hechos lo confirman a diario. Las noticias sobre nuestros cuerpos abandonados a la vera de alguna ruta también lo evidencian. Ninguna supuesta libertad nos resguarda de la violencia de género. El último informe del Observatorio "Mujeres, Disidencias, Derechos" de Mumalá revela que durante 2024, sólo el 12% de las víctimas de femicidio habían realizado una denuncia previa. Se trata del porcentaje más bajo en los últimos cinco años.
¿A qué se debe esa estadística? Sin dudas, las decisiones políticas, tanto a nivel nacional como provincial, tienen un impacto directo. El desmantelamiento de ministerios se traduce en la falta de medidas de prevención, esenciales para proteger a quienes enfrentan estas situaciones. Entre ellas, herramientas que faciliten y fortalezcan el circuito de la denuncia.
Para desentrañar este laberinto es que la Asociación Civil Generar y el Espacio de Promotoras Territoriales Micaela García del Movimiento Evita impulsaron una jornada de análisis, reflexión e intercambio acerca de las dificultades que se presentan a la hora de denunciar la violencia de género en la ciudad de Santa Fe, donde, según el Observatorio Daniela Cejas, sólo el 39% de quienes realizaron una denuncia por violencia de género llegó a solicitar medidas de distancia y/o botón antipánico.
Mientras que, de acuerdo con las Promotoras de Género y Diversidad Micaela García, en actividades de promoción de derechos realizadas en 16 barrios de Santa Fe durante 2023, de 305 mujeres encuestadas, el 70% había vivido o presenciado situaciones de violencia de género, y un 10% atravesaba activamente una situación de violencia. Ninguna de ellas conocía la existencia de la Dirección de Géneros y Disidencias.
Piedras en el camino
Durante la actividad, que se llevó adelante este jueves por la mañana en la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la Provincia de Santa Fe (Festram), pudieron exponerse las principales trabas y obstáculos que enfrentan las mujeres y disidencias al intentar acceder al sistema de protección en la capital provincial. Los datos compartidos durante la jornada -que fueron los resultados de los relevamientos hechos por organizaciones y observatorios- permitieron establecer que las fallas del sistema afectan a las víctimas. Se detectó tanto desconocimiento de las herramientas disponibles hasta demoras y revictimización en los procedimientos.
Liliana Loyola, presidenta de Generar, le dijo a Periódicas que "hicimos esta propuesta para analizar específicamente lo que se llama ´la ruta crítica de la denuncia´, que nosotras le pusimos también ´laberinto´. Las mujeres se encuentran con muchas dificultades que tienen que ver con la propia subjetividad, recorrido y decisiones; pero también con otras como la organización de esa ruta, factores externos o económicos. Todos esos factores hacen que muchas veces la mujer desista de una decisión que le costó tomar".
Asimismo, sostuvo que "es importante poner este tema en agenda porque parece ser que el Estado se olvidó. El Estado municipal que, para las leyes provinciales y nacionales debe dar las herramientas a través de las áreas locales, no cumple. Tenemos ordenanzas muy buenas, algunas plantean la creación de un Consejo de la Mujer y la Diversidad Sexual, donde se debería convocar a las organizaciones que trabajan esta temática y crear un registro, pero hasta la fecha no han llamado a ninguna reunión. Otra es la número 12.743 crea un Observatorio Municipal de la Violencia de Género, sobre el cual presentamos un pedido de acceso a la información pública y no recibimos respuesta".
Hacia adelante
Por su parte, la representante del Movimiento Evita, Paula Canalis, sostuvo que "asistieron muchas organizaciones que se dedican a acompañar casos de violencia de género. Pudimos exponer los datos y experiencias de las compañeras y discutir sobre los datos concretos que fuimos recopilando a lo largo de años de trabajo. También fueron personas que necesitaban información o que atraviesan o atravesaron situaciones de violencia a dar su testimonio. Esperamos que este sea el punto de partida para seguir encontrándonos y encausar todas las problemáticas que hay alrededor de la violencia de género en la ciudad de Santa Fe. También continuar con acciones concretas, no solamente las dos organizaciones sino todo aquel que se quiera sumar".
Celeste Baumgartner del grupo del Espacio de Promotoras Territoriales Micaela García del Movimiento Evita, contó que el asesoramiento y acompañamiento en casos de violencia de género lo hacen “en forma conjunta con algunas abogadas; acompañamos a que realicen toda la ruta de la denuncia que, como vimos, son unos seis pasos”.
“Vamos al lugar, hacemos capacitaciones, talleres abiertos a las vecinas y a quienes se quieran sumar. También armamos el taller de Ley Micaela para el territorio y lo llevamos a distintos espacios. Hemos ido a centros de salud y hasta a peñas de equipos de fútbol. También realizamos tareas de prevención en distintos barrios de Santa Fe. Trabajamos con cocineras comunitarias, a las cuales formamos para poder tener el primer acercamiento con las vecinas; su rol es fundamental”.
Cobertura colaborativa de Gabriela Filereto y Federica Kesseler