La caravana, convocada por la Mesa Ni Una Menos, se extendió por ocho cuadras. La movilización finalizó con la lectura del documento en la Plaza 25 de Mayo. El Día de la Mujer Trabajadora estuvo marcado este año por la pandemia, el aumento de la violencia de género y el reclamo de igualdad de derechos.
La jornada del #8M, Día de la Mujer Trabajadora, comenzó con el paro en la administración pública provincial (ver Decreto). Además, hubo actividades por la mañana en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNL. A su vez, desde el municipio se dispuso la gratuidad del traslado de mujeres y disidencias en el transporte público entre las 16.30 y las 21.
La movilización de este año estuvo signada por la pandemia. Desde la Mesa Ni Una Menos (NUM) se convocó a realizar una caravana en diferentes vehículos. El punto de inicio fue en las inmediaciones del Puente Colgante. Allí se congregaron les manifestantes para luego tomar Bulevar Gálvez, continuar por Urquiza y General López y finalizar frente a Casa de Gobierno.
La columna, conformada por mujeres, lesbianas, trans, travestis y no binaries que se movilizaron en automóvil, motocicletas, bicicletas, rollers y de a pie, ocupó unas ocho cuadras de largo. Estuvo encabezada por las banderas de NUM y de diferentes agrupaciones partidarias, barriales, gremiales, sociales y también por militantes independientes.
Al llegar a la plaza 25 de Mayo, desde la Campaña por la Emergencia Nacional en Violencia contra las Mujeres se nombró a las recientes víctimas de femicidio, haciendo hincapié en las santafesinas.
El acto fue conducido por la militante travesti Victoria Stéfano. En el espacio público, frente a los edificios oficiales, se leyó el documento de la Mesa Ni Una Menos de Santa Fe, en la voz de diferentes referentes del movimiento de mujeres, lesbianas, trans, travestis no binaries.
Ejes del documento
El documento comenzó resaltando la influencia de la pandemia en la salud de las feminidades: "Somos la mayoría en el sistema de salud, expuestas al virus sin los elementos de protección suficientes;
somos la mayoría de la docencia, obligadas a volver a clases sin vacunas ni condiciones; somos la mayoría de las precarizadas del Estado, que ni siquiera contamos con licencia por maternidad; somos la mayoría de las desocupadas que ponemos el cuerpo en los barrios, con ollas populares y comedores, somos las que estamos expuestas a la mayor miseria, sin las necesidades básicas cubiertas".
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En cuanto a la situación laboral, en un contexto en el que el 87% de trabajadoras y trabajadores no ganan la canasta familiar, y el 60% no alcanzan la línea de pobreza, "hay discriminación sexual laboral, la integración de mujeres y disidencias al trabajo se hacen con tendencia a puestos menores, con muy difícil acceso a puestos gerenciales y, en general, el salario sigue siendo un 30% menos que los varones". Entre otros reclamos se pidió "Que se reconozcan y remuneren los trabajos comunitarios de cuidado, con sueldos acordes a la canasta; jardines públicos materno parentales; licencias por maternidad y paternidad de manera compartida durante el primer año de vida; no a la precarización de las y les trabajadores de la cultura".
Con respecto a la economía popular, sostuvieron: "cargamos, como la mayoría de nuestras compañeras con trabajos de cuidados y reproductivos de nuestros hogares, tareas que históricamente se nos asignaron y que no son reconocidas". Exigieron el reconocimiento y restitución de sus derechos como trabajadoras y trabajadores.
Al respecto de la violencia de género dieron números escalofriantes: en lo que va del año una mujer es asesinada cada 23 horas. En este marco, se exigió la implementación inmediata de la Emergencia en Violencia de Género. "Que el presupuesto destinado no sea una migaja para las políticas y programas que hemos ganado con la lucha en las calles y que sea destinado a medidas concretas que erradiquen la violencia que vivimos", demandaron. A su vez, pidieron "que las líneas telefónicas 144 y el 0800 funcionen correctamente" y la creación de una línea municipal "de fácil acceso con personal capacitado en la temática y que sea específica para las situaciones de violencia de género y disidencias".
Con respecto a la problemática trans travesti se exigió la inmediata implementación de las leyes de cupo laboral. Se ahondó en las situaciones de extrema desigualdad, pobreza y dolor a las que se somete a a esta población. A su vez, se exigió "acompañamiento a las Infancias trans para que vivan libres de violencias" y acompañamiento en los procesos educativos en todos los niveles obligatorios y de la formación superior y universitaria. También se mencionó la falta de capacitación del personal de salud para atender a las particularidades de esta población y la falta de acceso a viviendas. Finalmente, se instó "a las compañeras feministas que se solidaricen con nuestras luchas y nos acompañen a exigir la ley integral trans para poder planificar proyectos de vida digna".
Con respecto a la trata sexual y laboral, se denunció "la complicidad de ciertas fuerzas de seguridad en la facilitación de este delito, como también, la falta de una política pública que sea eficiente en la prevención, asistencia, contención, protección y asesoramiento jurídico para las víctimas y la restitución de sus derechos vulnerados". Finalmente, se mencionó a Natalia Acosta: "la seguimos buscando y afirmando la inoperancia de su búsqueda, en su momento, por parte de la Justicia".
Acerca de discapacidad, se resaltó "la inexistencia de datos y estadísticas sobre violencia de género hacia personas con discapacidad, la difusión de información sin criterios de accesibilidad, y la falta de acceso a servicios de salud y justicia con perspectiva de derechos, exponen a una enorme vulnerabilidad a las niñas, mujeres, y personas de la comunidad LGBTIQ+ con discapacidad".
Con respecto a la Ley de Educación Sexual Integral, resaltaron que a 14 años de su aprobación "no existen actualmente mecanismos para monitorear su efectiva enseñanza. No existen herramientas para estudiantes y educadores que puedan hacer valer su derecho cuando desde la institución es vulnerado".
Acerca de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, "que durante 15 años militó la campaña y el movimiento de mujeres y disidencias", denunciaron: "la existencia de dilaciones al momento de garantizar el derecho al aborto, que exceden los diez días que establece la Ley; dificultades en el circuito de referencia entre los diferentes niveles de atención y en el acceso a los turnos de ecografía obstétrica; demoras entre el pedido realizado por el efector del primer nivel y el momento en que las mujeres efectivamente pueden acceder al misoprostol; faltante de anticonceptivos en los centros de salud; no se garantizan derechos en el tercer nivel de atención; en el CEMAFE no se garantizan las prácticas en nuestra ciudad, debiendo trasladarse la mujeres y niñas a Rosario, sumando una vulneración más". Finalmente se exigió que "ningún objetor de consciencia sea jefe de equipos de ginecologías".
Con respecto a la Ley de Paridad, se señaló que "hasta el propio Tribunal Electoral, encargado de hacer cumplir la ley, hoy en su conformación está integrado por ocho varones. La ley que se estrena este año se aplicará en las municipalidades, y en el 2023 recién será aplicada para las comunas, situación que señalamos como una discriminación injustificada hacia las mujeres que habitan en los pueblos de la provincia".
Para finalizar, puntualizaron la problemática del acceso a la Justicia. "Necesitamos un fuero único para los casos de violencia de género, es un desgaste y una revictimización para las denunciantes que tengan que recorrer el fuero penal, el civil, solicitar el botón antipánico o tobillera y encima ser ellas quienes lleven la notificación al agresor en los casos de medidas autosatisfactivas o de distancia".
El final del documento, que fue ampliamente aplaudido, fue al grito de "sin perspectiva de género no hay justicia. Sin igualdad no hay justicia". Para finalizar, el amplio coro de todas las asistentes entonó el canto de "Ni una Menos, vivas nos queremos".
La jornada finalizó con diferentes intervenciones culturales a cargo de artistas santafesinas.
Cobertura: Rut Marega, Magdalena Artigues Garnier, Lucía Medina, Titi Nicola, Gise Curioni, Carolina Robaina, Julia Porta, Belén Degrossi
