Antonella Olmedo tenía 20 cuando la reconocida panadería en la que trabajaba de forma precarizada sufrió una explosión por pérdida de gas provocándole graves heridas hasta su posterior muerte. El dueño del local, condenado por la justicia, pidió permiso para viajar a Paraguay a ver a Colón.
El 13 de septiembre del año 2015, Antonella Olmedo estaba trabajando en una reconocida panadería ubicada en J.J. Paso y 4 de Enero, cuando se produjo una explosión en el local que le provocó quemaduras en el 66% del cuerpo. La joven de 20 años estuvo internada un mes durante el cual fue intervenida quirúrgicamente en varias oportunidades pero finalmente falleció. Se la considera una víctima de la precarización laboral, ya que la fuga había sido advertida por los empleados e ignorada por los encargados. Por el hecho fueron imputadas cuatro personas: Nicolás Francisco Colella, dueño de la panadería; Martín Wexler; propietario del local, Gustavo Arreguez quien tenía un maxikiosco lindante a la panadería y Nadia Sánchez, encargada de la sucursal donde se produjo la tragedia. Todos fueron imputados por "estrago culposo calificado por el resultado de muerte". A la fecha, todos gozan de libertad.
Penas y donaciones: condenados en libertad
Nicolás y Martín deben cumplir una condena de dos años y seis meses de prisión de ejecución condicional en suspenso. La condena de Nicolás consiste en donar 5 kg de pan y 5 docenas de facturas de factura por día de lunes a viernes durante el plazo de un año a la Casita de las Madres del Hospital de niños Orlando Alassia. En cuanto a Martín Wexler, debe donar 3 kg de arroz, 3 kg de fideos, 3 kg yerba y 5 litros de leche de forma semanal también a la casa de las madres del hospital, por el plazo de un año. Por otra parte, Nadia Sánchez, a quien las empleadas en reiteradas ocasiones habían alarmado del olor intenso de la pérdida de gas –haciendo caso omiso al reclamo-, debe donar dos bolsones de 56 pañales semanalmente junto a 5 litros de cajas de leche, también a la misma entidad por el plazo de un año. "Esperé cuatro años que les den una condena y nos encontramos con una de un año haciendo donaciones. No hay palabras", manifestó Marcela Olmedo, madre de la joven fallecida.
Pedido insólito
“Nos enteramos del pedido de Colella a través de las redes sociales. Después de la sentencia de Antonella, terminó la labor del abogado que teníamos y nadie nos notificó de lo que estaba pasando, nos enteramos a través de los medios”, expresó preocupada Marcela.
La madre de Antonella recordó que durante el mes que su hija estuvo hospitalizada jamás se acercaron a preguntar por ella, e incluso tras su muerte no le manifestaron sus condolencias. Los pedidos de disculpas en la audiencia donde se determinaron la sentencia, no fueron suficientes.
Hace unos días se viralizó un pedido por parte del condenado, Nicolás Colella, para viajar a Paraguay del 8 al 10 de noviembre. El objetivo no está explícito en la nota, pero aluden que quiere presenciar el partido de Colón-Independiente del Valle. La indignación y el repudio de familiares y vecinos no demoraron en llegar. “Desde el día que presentaron el pedido mi cabeza está nula. Es completamente disparatado pedir un permiso para ir a un partido de fútbol cuando ya no tengo más a mi hija”, denunció la mamá de Antonella. "Todavía tengo presente cuando dijo que lo habíamos llevado a la ruina y no tenía solvencia económica. Siento que es una justicia injusta, no tiene solvento pero ahora pide permiso para viajar”, reclamó Marcela.
El letrado Federico Baridón, quien actúa como abogado de María José Lacorte, la otra víctima de la explosión (se encontraba cerca de la panadería al momento del siniestro fatal), señaló que su cliente se suma a la oposición de tal pedido. “Sabemos que está dentro de los derechos de la víctima, por eso decidimos presentar un escrito en donde hicimos constar que es una falta de respeto pedir autorización para salir del país. Si bien no expresó el motivo del viaje, percibimos que está relacionado al evento deportivo de público conocimiento”, concluyó Baridón.
Cuatro años sin Antonella
El 15 de octubre se cumplieron cuatro años de la muerte por negligencia de Antonella Olmedo. Su familia se encontró con un fallo inentendible: condenas excarcelables, pedidos de permiso para viajes de placer (en su momento Nadia pidió permiso para un viaje al exterior y ahora se suma el de Nicolás para viajar a Paraguay), precarización laboral no reconocida como tal, ”un fallo que le garantizó impunidad a los de siempre, a patrones que precarizan vidas ajenas”, agregó Olmedo.
“Necesitamos que la sociedad no se olvide de los responsables y que la calle les recuerde la condena que un tribunal no se animó a darles. No tenemos odio, solo pretensión de justicia”, expresó la familia Olmedo.
El próximo 24 de octubre se llevará a cabo una nueva audiencia donde la justicia deliberará el pedido de Nicolás Colella.