La fiscalía inició la investigación 10 días después de la muerte, por negligencia de las Fuerzas de Seguridad.
Durante la mañana de este jueves se produjeron dos allanamientos en el barrio La Ranita, en el noroeste de la capital provincial, a raíz del asesinato de Alddana Lorenz. La joven falleció este lunes luego de ingresar al hospital José María Cullen el 24 de diciembre con un golpe en la cabeza.
Desde fiscalía se informó a Periódicas que uno de los allanamientos, realizado en la vivienda donde la joven fue atacada, arrojó resultados positivos. Y se adquirieron elementos de relevancia para la causa.
La fiscal a cargo de la investigación es Celeste Minniti, que investiga la causa como un "homicidio doloso por ser un hombre en contra de una mujer en un contexto de violencia de género agravada por el vínculo". En criollo: un femicidio.
Gracias a la autopsia de Lorenz, ordenada por Minniti, confirmaron la causa de muerte: una fractura de cráneo. De momento el máximo sospechoso apuntado por el crimen es el hermano de la víctima, quien se encuentra prófugo y es buscado por parte de las fuerzas de seguridad. Mientras que la madre de la chica fue identificada por abandono de persona.
Un camino de negligencias y abandono
Alddana, al igual que muchas personas trans, era trabajadora sexual, contexto en el cual había sufrido un fuerte ataque en el mes de octubre, con lo que comenzó para la joven un trayecto de violencias y desidias. Incluidas las estatales.
Con la salud notoriamente desmejorada por la agresión sufrida en octubre, hecho conocido por todo el contexto familiar, el ataque del 24 de diciembre fue letal.
Ese mismo día, después del golpe, la joven fue trasladada en un auto particular al hospital José María Cullen donde fue ingresada a la unidad de terapia intensiva. Tras 10 días fue intervenida dada la gravedad de su cuadro, sin éxito. Lo que culminó en su deceso.
A través de múltiples fuentes se confirmó la negligencia por parte de los trabajadores del Ministerio de Seguridad circunscriptos al nosocomio, al no realizar en tiempo y forma las actuaciones correspondientes en el ingreso de una persona con signos de violencia, como fue la situación de Alddana. Lo que implico la pérdida de 10 días vitales para el inicio de la investigación.
Al respecto, la ministra de Igualdad, Genero y Diversidad de la provincia, Florencia Marinaro declaró a medios locales que "hubo una falla del Cullen a la hora de informar el hecho y eso nos hizo perder tiempo".
