Rubén Darío López, de 42 años, cometió los ilícitos durante la infancia de dos de ellas y la adolescencia de la tercera. La sentencia, de 14 años y nueve meses, fue resuelta por unanimidad en el marco de un juicio oral que finalizó el martes 6 en los tribunales de Vera.
Rubén Darío López, de 42 años, fue condenado a 14 años y nueve meses de prisión por haber abusado sexualmente de tres hijas de su pareja en Calchaquí, localidad del departamento Vera.
La sentencia fue ordenada por unanimidad por las juezas Claudia Bressán (presidenta del tribunal) y Norma Senn y el juez Santiago Banegas, en un juicio que finalizó en los tribunales de Vera.
El fiscal que estuvo a cargo de la investigación y representó al Ministerio Público de la Acusación (MPA) en el debate es Valentín Hereñú. Tras conocer el veredicto, valoró que “se dispuso una pena muy cercana a la que habíamos solicitado en nuestros alegatos, que era a 15 años de prisión”.
Asimismo, afirmó Hereñú que “el tribunal consideró que las pruebas que presentamos desde la Fiscalía son contundentes para acreditar los ilícitos cometidos por López, quien era una figura paterna para las víctimas”. E indicó que “para ponderar el monto de la pena, se contempló el daño que el condenado les causó a las hijas de su pareja a las que abusó, quienes eran menores de edad al momento de los hechos”. El fiscal agregó que “actualmente, dos de las víctimas son mayores de 18 años y la tercera –que era la más pequeña–, falleció”.
Yo sí te creo
Hereñú afirmó que “en la época en la que dos de las víctimas transitaban su escolaridad primaria y la otra era adolescente, López las sometió a prácticas sexuales de manera sistemática”. También precisó que “las conductas delictivas se enmarcaron en la convivencia que los cuatro mantenían con otros integrantes del grupo familiar” y que “en ocasiones, López les ofreció a dos de las hijas de su pareja darles dinero o comprarles bienes a cambio de que ellas realicen actos sexuales con él”.
En cuanto al origen de la investigación, el fiscal destacó que “la primera denuncia en relación a este caso fue radicada por una terapista ocupacional y una psicóloga que integran el Equipo Interdisciplinario de la comuna de Pedro Gómez Cello, departamento San Justo”. Explicó que “las profesionales habían conversado con la víctima que luego falleció, a raíz de que ella había planteado en la escuela que sufría abusos por parte de su ‘padrastro’”.
“Al enterarse de que se había iniciado una investigación penal, las otras dos hijas de la pareja de López que fueron abusadas por él lograron hablar de sus padecimientos”, subrayó el funcionario del MPA.
La pena
López fue condenado como autor de abuso sexual gravemente ultrajante agravado, por la edad de las sobrevivientes y por la situación de convivencia preexistente, y promoción a la corrupción de menores agravada, también por la edad y la convivencia, en perjuicio de dos de las hermanas.
La pena se le impuso también como autor de abuso sexual agravado, por la edad y la convivencia, por los ilícitos cometidos contra la otra hija de su pareja a la que vulneró.