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Que una absolución no tape el bosque

Este jueves se conoció la absolución para el profesor de educación física juzgado por abuso sexual contra cinco niñas. Tras el fallo, los mensajes del bloque acusador, del gremio docente y de algunos sectores sociales se dirigen hacia la credibilidad de los relatos de los menores y las condenas previas por abuso. ¿Una absolución quiere decir inocencia? ¿Todas las denunciados por abuso son víctimas?
Thamina Habichayn
Autora: Victoria Carballo

#NotAllMen, dijeron los varones europeos cuando varios hombres blancos, de clase alta -algunos millonarios y famosos- y con “buena reputación social” fueron acusados, juzgados y condenados por abuso sexual. Ese hashtag que hace referencia a que “no todos los hombres son abusadores o violadores” fue una reacción masiva en las redes sociales. “No todos los hombres, pero siempre son hombres”, respondieron las feministas. Es que, según explicó la antropóloga social española, Elisa García Mingo, el 95% de los crímenes sexuales son cometidos por varones, contra distintos géneros. No todos son abusadores, sí, es cierto. La absoluta mayoría de los abusadores son hombres, sí, eso también es cierto.

¿Pero qué tiene que ver todo esto con la absolución al profesor de educación física santafesino?

Al conocer la resolución del tribunal que absolvió de culpa y cargo al profesor que había sido juzgado por cinco hechos de abuso sexual contra alumnas de entre 3 y 6 años, el abogado defensor sostuvo que este caso es un antes y un después, que los deja “muy conformes la decisión del tribunal de avanzar sobre una investigación absolutamente irregular, con tintes fraudulenta, una intervención del equipo local de niñez que le fue funcional, una actuación irregular y por fuera de sus incumbencias” y que “si se establece esto que estábamos pidiendo y que plasmó el tribunal, estaríamos en condiciones de avanzar sobre otros fallos que como este podrían haber salido en sentido contrario con la misma modalidad”.

¿Cuáles son esos "otros fallos"?

De 2014 a 2019 crecieron las denuncias por delitos contra la integridad sexual en la provincia de Santa Fe. En los últimos años, la tendencia se mantuvo en valores similares. Durante el año pasado se iniciaron 3687 legajos por causas de delitos sexuales en toda la provincia, mientras que en 2022 habían sido 4077.

Durante 2023, 467 personas fueron condenas por abuso sexual en toda la provincia de Santa Fe. En la unidad regional 1, es decir Santa Fe, fueron 148. De ese total, solo un 3% fueron mujeres (entre 4 y 5 en números absolutos).

Autora: Titi Nicola
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Qué nos enseñó el caso Pélicot

El caso de Gisèle Pélicot, durante el cual renació la discusión del #NotAllM en las redes, puede ser un ejemplo para explicar la reacción tras el fallo en Santa Fe. En Francia, 51 varones blancos de clase alta de diferentes edades, generaciones y profesiones, violaron a la mujer en su propia casa, con el aval de su marido. El propio esposo de la mujer y culpable de todos los abusos que ella sufrió mientras estaba inconsciente expresó que sólo tres de cada diez varones a los que invitaba a abusar de su esposa se negaban a participar.

#NotAllMen, es cierto, pero ese nunca puede ser el argumento para no creerle a un niñe o una mujer que denuncia un abuso sexual. Así como puede ser prejuicioso y erróneo decir que “todos los hombres son abusadores”, también lo es decir que los que fueron condenados no lo son o que las denuncias por abuso sexual son todas falsas.

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Caricia al alma

Otra de las declaraciones que circuló tras el veredicto del tribunal fue la de Pedro Bayúgar, secretario general del gremio Sadop de docentes del sistema educativo privado. “En el juicio se maltrató a los docentes, no sólo al acusado, sino que se trató de encubridores a los demás docentes que declararon, esa acusación falsa de la fiscalía y la querellante, habla a las claras de cómo se considera a los docentes, se los maltrata y no se los valora. La sentencia es de alguna forma una caricia al alma, habla de la valorización del tribunal de la tarea docente que es lo que estaba en juego”, sostuvo. Pero no perdamos el eje y preguntémonos otra vez qué es lo que estaba en juego: ¿la tarea docente, la reputación del acusado, los fallos previos, la cantidad de denuncias, las cámaras de seguridad de la escuela a las que la policía nunca tuvo acceso, los juicios y condenas previas a varones por cometer abusos sexuales en la región o -lo que parece ser lo verdaderamente importante- los seis relatos de niños de entre 3 y 6 años que hablaban de abusos sexuales en una escuela?

Autora: Victoria Carballo
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Sobre la absolución

Al respecto de la absolución del profesor en esta primera instancia, los defensores Marcos Barceló y Macarena Olivera dijeron que van a buscar mantener firme la condena.

Los fiscales a cargo de la investigación, Matías Broggi y Jorgelina Moser Ferro, aclararon que apelarán la decisión del tribunal. La querella comunicó lo mismo.

El veredicto demuestra que el tribunal no les dio crédito a los testimonios de las niñas y los niños que fueron víctimas y testigos de los abusos, se trata de una grave violación a los estándares internacionales de protección y promoción de los derechos de las personas menores de edad", sostuvo Moser Ferro.

"En entrevistas en cámara Gesell, diferentes alumnas y alumnos del docente juzgado brindaron relatos sostenidos acerca de lo sucedido", planteó la funcionaria del MPA. "Con recursos propios de su corta edad, mencionaron espontáneamente al profesor y contaron cómo fueron las conductas delictivas", manifestó. "Se expresaron con claridad y no hay ningún indicio de que hayan sido inducidos para declarar de la forma en la que lo hicieron", agregó.

Autora: Gise Curioni

La abogada querellante, Carolina Walker Torres, publicó un comunicado tras conocer la resolución. “Aunque aún no conocemos los fundamentos es evidente que en Santa Fe tenemos una justicia para pobres y otra para el santafesino acomodado con educación secular, Justicia clasista si las hay”, sostuvo.

“Hemos asistido a un juicio con pruebas de una contundencia abrumadora, con cinco cámaras Gesell con niñas relatando abusos sexuales con sus palabras, cuerpo y dolor. Hemos visto exámenes médicos compatibles con abuso sexual. Escuchamos a profesionales, familiares y docentes desresponsabilizandose con guiones predictados vaya a saber por quién. Nada apoya esta absolución, mas que amigos acomodados, sectores de poder y religiosos de la ciudad venir a relatar lo buen tipo que era. Un gremio como Sadop apoyando a un acusado de abuso sexual Infantil de cinco alumnitas pobres y vulnerables de una escuela periférica, frente al poder gremial y del clero como siempre cómplice”, continuó y finalizó: “yo elijo creerle siempre a las niñas”.