La Fiscalía dio a conocer los avances en la investigación del femicidio de Celia Ester Acosta ocurrido en la localidad del sur de la provincia de Santa Fe. Amigos y familiares de la víctima, subrayan la existencia de denuncias de violencia de género contra la ex pareja de la mujer y la falta de respuesta estatal.
El pasado sábado, el cuerpo de Celia Ester Acosta, también conocida como Xiomara, fue encontrado en su domicilio en la localidad santafesina de Carcarañá. De las primeras indagaciones surgió que el femicidio habría ocurrido aproximadamente 72 horas antes. Familiares de la víctima dieron a conocer que la ex pareja de la mujer tenía al menos tres denuncias por violencia de género y un pedido de restricción perimetral. El botón antipánico prometido nunca había sido entregado.
Ayer la fiscalía informó sobre las novedades en la investigación del delito. Así pudo saberse sobre la acción conjunta de personal de la división científica y médicos policiales. Según lo declarado por el órgano acusador, se levantaron huellas y rastros y se concretó relevamiento del lugar del hecho. Asimismo, se tomaron fotografías, se realizó inspección ocular de la escena y se confeccionaron croquis demostrativos. Dos teléfonos celulares fueron enviados a peritar y se ordenó la realización de la autopsia.
Como resultado de estos procedimientos pudo determinarse que la puerta de ingreso no fue forzada, que contaba con una cadena de seguridad. No se encontraron, en principio, elementos que muestren que la vivienda hubiera sido violentada.
Según el pre informe de autopsia, Celia Ester Acosta habría fallecido por shock hipovolémico como consecuencia de una hemorragia masiva de tórax provocada por lesiones de arma blanca. De los testimonios de los vecinos surge que la mujer fue vista por última vez el jueves pasado.
La fiscalía comunicó que una línea investigativa vincula el delito con la ex pareja de la víctima pero no se descartan otras líneas sobre las que también se está trabajando. Algunas medidas y procedimientos implementados se mantienen en reserva por necesidad del proceso.
Catalina Pizzichini forma parte de la Colectiva Feminista Carcarañá, una organización creada hace un año, donde un grupo de mujeres brindan asistencia y asesoramiento a mujeres en situación de violencia de género. En diálogo con Periódicas comentó que se enteraron del caso el pasado sábado por la madrugada. "Cuando nos confirman la información no podíamos creerlo, fue una noticia muy dura para nosotras, para todo el pueblo en realidad porque es una ciudad muy chica. Nosotras hace un año que venimos repitiendo, en todos los medios que podemos, la situación que sufren las mujeres de nuestra ciudad. Pero nos encontramos muy solas, no recibimos respuestas, sobre todo desde el Estado, sobre todo la policía". Además relató cómo suelen trabajar en los casos de urgencia: "Cuando la policía no hace nada, nosotras como colectivo hacemos guardia en casa de la víctima o si ella lo prefiere cada una en su casa pero alerta toda la noche por si surge alguna emergencia porque nadie las protege. El Estado y la policía las deja totalmente desamparadas".
Pizzichini recuerda que la ausencia del Estado también se vio en el femicidio de Celia: "Ella había hecho varias denuncias, la última fue en diciembre. Cuando nos enteramos empezamos a mover las redes sociales para que nos acompañen en el pedido de justicia y sobre todo en el reclamo a las autoridades porque la situación como está no puede seguir así".
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Desde la colectiva organizaron una marcha para el lunes 24. Se realizó a las 19 en la plaza de Carcarañá y marcharon hasta la comisaría. Sobre los incidentes ocurridos en la marcha, la militante explicó que algunas personas, conocidos y amigas de Celia, empezaron a tirar botellas y huevos a la comisaría pero que no era lo planeado desde la organización. "Cuando la policía nos atendió nos dijo que sin una orden del fiscal no pueden detener a nadie. Pero el principal sospechoso, su ex pareja, nunca fue buscado. Sentimos que si nosotras no estamos atrás todo el tiempo, reclamando, yendo y hablando con distintas autoridades nadie se ocupa".
A la marcha asistieron vecinos, familiares y organizaciones de la zona. En Casilda se hizo una movilización a la misma hora y algunas mujeres se acercaron hasta Carcarañá. "Siempre tejemos redes, estamos muy agradecidas", expresó Pizzichini.
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Casos de violencia machista judicializados son los temas que convocan a esta dupla a trabajar en equipo.
