Habrá una marcha este martes a las 11 frente a Tribunales para reclamar que el juez de primera instancia Rodolfo Mingarini vaya a juicio político.
A través de un comunicado, la mesa Ni Una Menos se pronunció en alerta y movilización hacia los tribunales santafesinos en reclamo de que el juez de primera instancia Rodolfo Mingarini vaya a juicio político por sus actuaciones judiciales en al menos dos audiencias donde se imputó a varones por violencia de género y terminaron en libertad con restricciones.
Desde la organización feminista reclamaron que se constituya el tribunal de enjuiciamiento y se admita la denuncia de la Procuración General. Y agregan: "Necesitamos que cada miembro de la Corte, los dos representantes del Colegio de Abogados Ferrero y Pagano, el senador Traferri y el diputado Pullaro consideren el inicio urgente de la investigación de este caso que tiene efectos a futuro para la vida y la seguridad de todas las mujeres".
"Las niñas y mujeres tenemos miedo de las decisiones de los Mingarini y no queremos que la justicia los proteja. Queremos que lo juzguen ya. Nos movilizaremos todos los martes frente a Tribunales a las 11 hasta que la Corte convoque al tribunal y decida la admisibilidad de la denuncia", agregaron al mismo tiempo que reclaman una "justicia con perspectiva de género". A la movilización adhieren diferentes agrupaciones feministas por fuera de la Mesa Ni Una Menos, como también sindicatos y organizaciones barriales.
En representación de la Multisectorial de Mujeres y la Mesa Ni Una Menos, la reconocida abogada Paula Condrac, expresó en diálogo con Periódicas: "Los jueces deben atraer los conflictos, deben imantarlos. Deben actuar de tal forma de restituirlos a la sociedad convertidos en paz social y no en escándalo. ¿Y por qué Mingarini causa este escándalo? Porque da una libertad, y no una prisión preventiva con argumentos que rescriben el Código Penal. Él rescribe el artículo 119 del Código Penal, que define el tipo penal del abuso sexual con acceso carnal. Lo que hizo fue que en ese caso el uso de preservativo indica que no existe el delito. Además exige para que se configure este delito una víctima perfecta, una víctima ejemplar, una mujer heroica. No pasa el menor estándar en materia de derechos humanos de las mujeres".
"Y el problema es que hace a la cultura del abuso, la forma de pensar el fallo de Mingarini, el razonamiento judicial abona a la cultura del abuso y de la violación porque causa el efecto exactamente inverso al efecto Thelma Fardin. Con Thelma muchas mujeres se animaron a denunciar, con Migarini las mujeres callamos. Las mujeres y las niñas le terminamos teniendo más miedo a Mingarini que a los abusadores y que a los femicidas", agregó Condrac.
Y detalló: "Cuando hablamos de que es necesaria la perspectiva de género no un capricho nuestro, es una imposición del bloque de constitucionalidad y de convencionalidad de la Cedaw, de Belén Do Pará, de la ley Micaela. Él no puede apartase reescribiendo el Código Penal. Acá no estamos hablando del contenido del fallo de Mingarini, a eso lo debe revisar la Cámara de Apelaciones. No queremos de la Corte Suprema lo que hacen en general de mandar a los jueces al sótano, sin ser investigados o juzgados. Mingarini tiene causales de destitución por fuera de ese fallo. Con jueces como Mingarini, ¿quién va a denunciar? ¿la víctima perfecta para este sistema? ¿sería una mujer muerta?".
"Hoy Mingarini está como juez de ejecución penal. Esto significa que está dando libertades, computando plazos, otorgando beneficios. Puede hacer lo mismo que hizo el juez Rossi, que liberó a Wagner que luego fue el femicida de Micaela. Va más allá del contenido del fallo del 30 de mayo porque lo que hace este juez es sostener la cultura de la violación . ¿Quién va a denunciar a alguien que te viola con preservativo? Hoy probablemente nadie, tenés que estar muerta para que te crean", concluyó.