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Mahmud: "No pueden seguir quitándonos vidas en la clandestinidad"

Son las palabras de la diputada provincial sobre el debate por la Interrupción Voluntaria del Embarazo. Además, hizo un balance de su primer año en la Legislatura.

 

Créditos: prensa Gisel Mahmud

La diputada provincial, Gisel Mahmud, hizo un balance de su trabajo legislativo durante el 2020 y analizó en un diálogo con Periódicas los pasos a seguir para lograr una agenda de género, sorora e inclusiva en la Cámara de Diputados de Santa Fe.

— Estamos a pocas horas de la votación del proyecto de ley de la Interrupción Voluntaria del Embarazo en el Senado de la Nación, ¿qué significa para las luchas de las mujeres y disidencias?

GM: Es un momento histórico. Es la posibilidad de que se concrete con la sanción de la ley en el Senado, la conquista de un derecho por el que miles de mujeres y disidencias en Argentina luchan hace décadas.

Desde hace ya 15 años la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal Seguro y Gratuito viene mostrándole a la sociedad argentina que la clandestinidad no salvó ninguna vida, que el aborto clandestino es un negocio que lucra con la vida de miles de mujeres por año que mueren por las condiciones en las que esos abortos son practicados, que representa una cuestión de salud pública porque lo que está en juego es el verdadero acceso a la salud integral para las personas gestantes.

Aquí en nuestra provincia, en la ciudad de Rosario, con correcta aplicación de protocolos hemos disminuido las muertes maternas por abortos a tan solo dos en 10 años, hemos implementado políticas de educación sexual integral, de anticonceptivos en efectores públicos y también protocolos de interrupción del embarazo que en su conjunto, como un sistema de políticas, han mejorado las condiciones que tenemos las mujeres para ejercer nuestros derechos sexuales y reproductivos. Sabemos que con políticas serias, integrales, abarcativas, podemos cambiar esta realidad para que dejen de morir mujeres en abortos inseguros e ilegales.

Ojalá que el Senado entienda, que así como la ilegalidad actual no disuade a la mujer que quiere abortar, legalizarlo tampoco será un incentivo para que todas salgamos a practicar un aborto. Que no se trata de si el aborto existe o no, porque existe, se trata de si va a ser legal y seguro o si va a seguir quitándonos vidas en la clandestinidad.

— Y este año estuvo bastante marcado por la agenda feminista en la política santafesina. ¿Se pudo articular con otros espacios partidarios? ¿cómo fue?

El 2020 fue un año de un gran trabajo conjunto entre todas las Legisladoras de todos los partidos. Quiero destacar un ejemplo, que no es el único, pero sí uno muy importante que fue la lucha por la paridad de género en Santa Fe. En esa lucha nos encontramos casi todas, excepto a un solo bloque. En un esfuerzo compartido y una causa común que peleamos juntas y que por ello, hicimos realidad.

Ese trabajo conjunto se fue materializando a partir de diálogos cotidianos, de reuniones entre todas, de acompañarnos en distintas iniciativas legislativas, de trabajar para que los dictámenes sean favorables en las comisiones y lleguen a votarse al recinto, en grupos de WhatsApp que nos mantuvieron en contacto todo el año en esta virtualidad que nos atravesó, de articular con los distintos movimientos sociales y políticos de santa fe como la mesa por la paridad, la red provincial por la Educación Sexual Integral (ESI), la asamblea provincial de diversidades sexuales entre otras.

— A nivel provincial, ¿qué se logró y qué falta conquistar de parte de los movimientos feministas? ¿Cuáles son las deudas pendientes de la legislatura?

Logramos instalar una nutrida y variada agenda de género en Santa Fe durante todo el año. Trabajamos apoyándonos mutuamente en iniciativas como la ley de ESI, la ley de gestión menstrual, la ley de acceso a la vivienda para mujeres víctimas de violencia, la ley de indicadores de género, la ley integral trans, las capacitaciones de la ley Micaela al poder legislativo. Logramos todas esas medias sanciones y muchas más, que esperan tratamiento en el senado, donde tenemos la madre de todas las batallas.

— De cara al 2021, ¿qué temas se abordarán desde tu banca el próximo año?

Me interesa profundizar el trabajo por la ESI, para lograr de una vez por todas la sanción definitiva, así como también, lograr la adhesión de la provincia al convenio 190 de la OIT sobre violencia y acoso en el mundo laboral. Una ley más que necesaria en estos tiempos que corren.

Seguramente seguiré sumando nuevas iniciativas a las que ya presenté este año, para aportar a cambiar nuestro sistema de justicia, que es machista y patriarcal y que nos excluye y revictimiza a las mujeres permanentemente.