A seis años del final del segundo juicio, el fallo que lleva las firmas de Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Carlos Fernando Rosenkratz dejó firme las condenas a 20 y 16 años de prisión para Nidia Noemí Morando y Juan Pablo Baraldo por abusar de un familiar menor de edad en la ciudad de Esperanza.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación dejó firme la condena establecida para Nidia Noemí Morando y Juan Pablo Baraldo quienes abusaron sexualmente de un niño de su familia en Esperanza. De esta manera, el Caso Baraldo tiene un cierre luego de los dos juicios que se llevaron adelante.
El fallo del máximo tribunal en lo penal de la Argentina lleva las firmas de los jueces Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Carlos Fernando Rosenkratz, quienes dejaron firmes las condenas a 20 y 16 años de prisión para la abuela y el tío que abusaron del niño menor edad.
La Corte desestimó el recurso que iterpusieron los acusados y confirmó la condena que en 2018 habían impuesto los conjueces Jorge Silva, Alfredo Olivera y Néstor Pereyra. En ese entonces, también habían condenado al abuelo del niño, Víctor Hugo Baraldo, quien falleció en prisión.
El veredicto de 2018 ya había sido confirmado el 12 de febrero de 2019 por la Cámara de Apelaciones Penal de Santa Fe y luego por la Corte Suprema de la provincia, ante diversos recursos que interpuso el abogado Eduardo Jauchen en defensa de los condenados.
Los Baraldo
La denuncia que inició la investigación penal fue realizada en 2014, por la madre del niño. Tras los procesos judiciales comenzó el primero de los juicio, que debió ser suspendido. En octubre de 2018 inició un nuevo juicio tras el que los Baraldo resultaron condenados.
Los abogados defensores apelaron la condena por lo que debió ser confirmada en la Cámara de Apelaciones para que quede efectiva. Finalmente, el 7 de marzo de 2019, los Baraldo fueron detenidos y comenzaron a cumplir sus penas, pero Víctor Hugo Baraldo (el abuelo) falleció dos semanas después.
El caso fue escandaloso e incluyó amenazas a periodistas de Esperanza y Santa Fe. Además, durante el tiempo en que los condenados no estuvieron presos, incumplieron medidas de distancia. Incluso Morandini fue nuevamente denunciada en febrero del 2018 por su hija, por no acatar la orden judicial que le imponía la restricción de distancia respecto de la víctima.