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Intento de femicidio en el centro: "Nadie hace nada"

Fue esta mañana en un edificio de calle Francia al 2700. El hombre logró ingresar al departamento donde vivía su ex pareja, la atacó y se autolesionó. La mujer lo había denunciado en múltiples ocasiones y contaba con medidas de restricción de acercamiento y botón antipánico.

Marcha del 3J en Santa Fe. Autora: Priscila Pereyra

Un ataque machista conmocionó el centro de la ciudad de Santa Fe durante la mañana de este lunes, cuando un hombre, que tenía una orden judicial de restricción de acercamiento vigente, irrumpió en el edificio donde vivía su expareja (en calle Francia al 2700) y la atacó.

El hecho se registró alrededor de las 6.30. Según los reportes, el agresor irrumpió en el edificio y atacó a la mujer, que estaba por salir a trabajar. Los vecinos indicaron que la agredió violentamente en el rostro y la cabeza con una manopla de hierro y le provocó golpes y cortes.

La sobreviviente, de 36 años, fue rápidamente asistida y trasladada de urgencia al Hospital Cullen, donde se encuentra fuera de peligro.

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Fuga y autolesión

Tras la agresión el hombre intentó fugarse. Se ocultó en una obra en construcción contigua a la propiedad. Allí fue hallado por personal de la brigada motorizada con una herida cortante en el cuello, aparentemente autoinfligida con un arma blanca, en un intento de quitarse la vida.

Fuentes policiales indicaron que, además de la autolesión, el agresor (de 38 años) se habría arrojado al vacío en la zona en construcción. Bomberos Zapadores debieron trabajar para retirarlo del lugar, y fue trasladado también al Hospital Cullen en grave estado de salud, bajo custodia policial.

Las autoridades judiciales confirmaron que existía una orden de restricción de acercamiento entre el agresor y la sobreviviente.

El relato de su familia

Consultado por los medios de comunicación David, el hijo de la sobreviviente, contó que sus hermanos de 12 y 13 años son hijos del atacante y se encontraban en el departamento donde vive su madre. Relató que la relación terminó "hace fácil un año, pero siempre con acosos, mandándole mensajes, a ella, a mí. Decía que ya sabía nuestros horarios, cómo nos movíamos, era constante". También contó que su mamá "vive haciendo denuncias, yendo al Ministerio de la Mujer". A su vez se refirió a que el victimario tendría contactos con la barra brava de Unión y que es hijo de una funcionaria jubilada del poder legislativo, dando a entender que por eso "siempre salía impune, nadie hacía nada".

El jóven manifestó que se lo encontraba en diferentes lugares, inclusive en Buenos Aires durante un viaje. Y que la mujer contaba, además de con medidas de restricción, con un botón antipánico en el celular.

Por otra parte Ángeles, la madre de la sobreviviente, relató que el atacante ya estuvo preso por violencia de género durante ocho meses y que "lo largaron por buena conducta. El otro día me contó que tenía 18 llamadas perdidas de él. Hoy ella iba a ir a Tribunales a mostrar eso. ¿Qué están esperando? ¿Qué aparezca en una bolsa de consorcio?".