Este miércoles 7 de agosto, agrupaciones de todo el arco militante santafesino se encontraron en el marco de la celebración de San Cayetano, santo patrono del pan y el trabajo. De la movilización participaron desde la Pastoral Social, hasta la Asamblea Ni Una Menos y la Mesa del Orgullo. La fe y la cohesión contra el hambre y el ajuste de Milei y sus aliados.
En una columna de poco más de 100 metros de extensión, las mujeres y disidencias santafesinas marcharon junto a los movimientos sociales, algunos sindicatos y organizaciones de derechos humanos, en el marco de la festividad por el día de San Cayetano.
El santo del panteón católico es venerado en la Argentina como patrono del pan y el trabajo desde la crisis económica del 30, cuando el párroco porteño Domingo Falgioni impulsó su veneración como intercesor por el acceso al empleo y el alimento en medio de un clima de empobrecimiento generalizado en el país.
Al mismo cura se le adjudica la creación de la popular estampa de San Cayetano con Jesús niño y la espiga de trigo. Desde entonces la fe en el santo no ha parado de crecer, sobre todo entre los sectores populares y las organizaciones sociales que año tras año marchan hacia su santuario en Liniers en un doble sentido: como signo de fe y como una contundente muestra de las necesidades en estos sectores.
En Santa Fe la movilización comenzó a las 15:30 con la concentración en el palomar de la Plaza Colón, en las intersecciones de calles La Rioja y Rivadavia, avanzando por esta última en sentido a Bulevar Gálvez y finalizando cerca de las 17 en la explanada de El Molino, Fábrica Cultural, donde hubo un modesto pero contundente acto donde referentes de las organizaciones nucleadas en la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) hicieron lectura de un documento.
"Esta movilización popular de San Cayetano por paz, pan, tierra, techo y trabajo en Santa Fe, posibilitó la construcción de un espacio de unidad inmenso que hoy tiene como convocantes a la UTEP, a los movimientos sociales, a la CGT, la CTA de los Trabajadores, la CTA Autónoma, la Pastoral Social, el Foro Contra la Impunidad y por la Justicia y la Asamblea Ni Una Menos, pero que además suma a organizaciones de jubilados, de estudiantes, de otros sectores del campo popular, como así también a partidos y agrupaciones políticas", señalaron las primeras líneas del escrito.
Todo San Cayetano es político
Las organizaciones hicieron hincapié en "la política de hambre y pérdida de derechos que impulsa el presidente Milei" y señalaron que mientras a nivel nacional "la pobreza llegó al 54,9% y la indigencia al 20,3% de la población en el primer trimestre", en Santa Fe "la pobreza llego al 60,6%, muy por encima de la media nacional, donde los que más están sufriendo son nuestras infancias, ya que el 80% de los menores de 14 años son pobres".
"Esto es la consecuencia de los primeros seis meses del peor gobierno democrático que hemos tenido desde la dictadura hasta acá, junto con el de Carlos Saúl en la década de los 90", señalaron. "Estos números muestran lo que venimos sufriendo y viendo todos los días en el barrio, en cada comedor y copa de leche comunitaria, en las cooperativas de trabajo; es lo que nos comentan los maestros, vecinalistas, asociaciones y los párrocos que laburan en la barriada".
"Aunque esta situación sería mucho más grave si desde la inmensa red comunitaria y solidaria de organizaciones sociales, instituciones educativas, religiosas y vecinales no garantizaramos el acompañamiento diario y un plato de comida a los miles de niños que hoy en Santa Fe están en la pobreza y la indigencia. Asistencia alimentaria y trabajo territorial y comunitario que seguimos sosteniendo a pesar del corte total de los programas alimentarios por parte de Milei, a pesar de la destrucción del Potenciar Trabajo (programa de fortalecimiento laboral que llevaba alivio al bolsillo de más de un millón de argentinos y argentinas) y a pesar del desguace de la obra pública de urbanización para los barrios populares", indicaron en el texto.
En el mismo escrito señalaron también que "la mentira electoral del gobierno nacional se cayó ni bien asumieron, ya que el ajuste nunca fue a la 'casta', sino que fue para el pueblo trabajador" y que "la ganancia neta de los capitales más concentrados en los diferentes mercados, se incrementó en estos meses en más de un 800% respecto al año anterior con aumentos que superan el 9000% en laboratorios, el 5000% en el complejo exportador de granos, más del 1300% en el sector alimenticio, 945% en el sector bancario, como para nombrar quienes son los grandes ganadores ante este criminal ajuste".
También apuntaron contra el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), aprobado dentro de la Ley Bases, que entrega "por tres décadas los recursos energéticos, hidrocarburíferos y mineros sin exigir ni una cuota de proveedores locales, ni un esquema de transferencia tecnológica, ni desarrollo de la cadena de valor de nuestro país, ni contratación de mano de obra, ni obligaciones de compre nacional. Es decir, se llevan todo y no dejan nada".
Otro tema incluido en los reclamos fue el plan de privatizaciones, previsto en la misma ley nacional, que "repite la experiencia que fracasó en los años 90 con el consecuente aumento de la desocupación". "Quieren entregar nuestro patrimonio sólo para alimentar el flujo de caja en dólares de un gobierno desquiciado que no consiguió un solo crédito y cuyo único recurso es rematar el país. Un Estado que pretende retirarse de su rol de garante de los derechos ciudadanos. Este proyecto avanza en el achicamiento, desaparición y fusión de áreas del Estado que suponen, además de decenas de miles de despidos, el desmantelamiento de las políticas públicas, como las construidas en torno a Memoria, Verdad y Justicia, que han permitido los juicios de lesa humanidad y la recuperación de la identidad de los hijos e hijas apropiados por los genocidas luego de asesinar a sus madres".
"Ante esta nueva agresión contra el pueblo e intento de destrucción del Estado nacional argentino, afirmamos que un pueblo sin Estado no puede ejercer soberanía. Sin soberanía no hay patria y sin patria no hay destino. Para finalizar convocamos a todos los sectores populares, partidos políticos y a todos, a que sigamos luchando en unidad por paz, pan, tierra, techo y trabajo", concluyeron.
Tras la lectura del documento, el micrófono se abrió a los referentes de los distintos espacios. Desde la CTA llamaron a todo el campo militante a "torcer el pulgar hacia abajo" del gobierno nacional, y desde el Foro Contra la Impunidad y por la Justicia llamaron a concentar este jueves 8, a las 16 en la Plaza del Soldado, por el asesinato de Susana Beatriz Montoya en Córdoba, madre de un militante de H.I.J.O.S. y viuda de un desaparecido durante la última dictadura cívico militar.
El crimen de Montoya, que emula en los detalles a los crímenes del proceso militar, se investiga por estas horas. Desde el Foro insistieron en que "esto se habilita por el discurso violento" del Poder Ejecutivo y "la protección de los diputados que visitan a genocidas" juzgados y encarcelados, en referencia al escándalo en torno a la reunión de legisladores nacionales del oficialismo con ex represores presos.
En la calle
Como sucediera en los peores contextos socioeconómicos, la fecha, y la coyuntura particularmente, reunieron a sectores que suelen parecer distantes dentro del mismo campo popular: los movimientos sindicales de la economía informal y los sindicatos tradicionales, los espacios feministas y la pastoral social de la curia santafesina, los partidos políticos y los movimientos territoriales.
La resistencia contra el ajuste arribó a puntos de cohesión que van más allá de cualquier diferencia por fuera del bien común. Efectivamente San Cayetano trajo un pan bajo el brazo. Y sobre eso conversamos durante la movilización con referentes de organizaciones sociales presentes.
Carolina Garrido es militante de Nuestramérica. En diálogo con Periódicas señaló que "todas las organizaciones sociales y sindicatos adheridos a la UTEP marchamos contra el ajuste asqueroso de este gobierno fascista" en una marcha que caracterizó como histórica "contra el hambre y la falta de trabajo".
Acerca de los reclamos del sector, puso el acento en "el acceso a la vivienda, a la tierra y a una mejor vida para nuestros barrios, donde el ajuste pega muchísimo y muy duro". "Estamos reclamando que nos entreguen los alimentos para los comedores y los merenderos. El aumento de la pobreza es impresionante. El 60% de los santafesinos es pobre y ni hablar de la indigencia que hay, de las personas en situación de calle. Este gobierno nos empuja a eso", insistió.
Garrido además hizo hincapié en las violencias por motivos de género "que aumentan cada día más, ya sea en los barrios populares o en la clase media" y señaló al contexto de crisis como un condicionante en el incremento de estas violencias en particular. "Toda esta situación horrible de nerviosismo, de falta de laburo, de plata, conlleva esta violencia que se descarga en las mujeres principalmente", resaltó.
La militante también expresó la necesidad de abordaje urgente de los consumos problemáticos que se "han incrementado muchísimo a raíz de la falta de trabajo". "En los barrios populares, a lo que acceden los chicos, la juventud, padres de familia, es a ser el 'soldadito' de los narcos. Lamentablemente hoy te está pagando un sueldo mejor el narco que un trabajo esclavo de cualquier otra cosa", señaló.
Carla Pereyra es militante del Movimiento Evita y activista trans. En relación a la fecha, a San Cayetano y al encuentro entre espacios, señaló que, el que esta movilización del campo popular se de en este marco "tiene todo el sentido". "Porque más allá de una cuestión religiosa, que la hay, las feministas y las disidencias tenemos también creencias, San Cayetano representa algo que hoy en día está en el foco de la cuestión: el trabajo, tanto el trabajo en el discurso de que 'hay gente que trabaja' y 'gente que no', 'gente que merece cosas' y 'gente que no', a esas dicotomías se las lleva puesta la misma realidad. No hay trabajo para nadie, nos estamos cagando de hambre. La crisis le está pegando especialmente fuerte a nuestro sector".
En cuanto a la participación de mujeres trans y travestis en la movilización, apuntó a que "uno de los grandes reclamos que hemos tenido históricamente ha sido el de poder acceder a un trabajo, el poder tener un trabajo digno y sustentarnos sin tener que recurrir a formas de trabajo que, más allá de ser una elección moral o no como la prostitución, muchas veces no son elegidas. Entonces también forma parte de eso. Es parte de los derechos que reclamamos: trabajo, salud, educación, vivienda".
Escribe. Se especializa en la temática trans-travesti y las notas viscerales.
